El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, denunció hoy que Estados Unidos tiene «una política de asfixia económica para provocar estallidos sociales en el país», tras las protestas contra el Gobierno que se registraron ayer en varios sectores de la Isla, tras lo cual su par de Estados Unidos, Joe Biden, le pidió «al régimen cubano» que «escuche a su pueblo».
Díaz-Canel, quien ayer se trasladó a San Antonio de los Baños, donde se iniciaron las protestas que luego se replicaron en varios centros urbanos de Cuba, desmintió hoy, en un mensaje transmitido por cadena nacional, haber llamado a la violencia cuando instó a la población a concentrarse en las calles para rechazar esas manifestaciones.
«Convocamos a todos los revolucionarios a salir a las calles a defender la Revolución en todos los lugares», había afirmado ayer Díaz-Canel en una alocución televisada, tras regresar de un recorrido por San Antonio de los Baños, distante 36 kilómetros de La Habana.
«No llamamos al pueblo a enfrentar al pueblo sino que llamamos al pueblo a defender su revolución», argumentó Díaz-Canel, y aseguró que la población se defendió ante los actos de violencia y vandalismo protagonizados por quienes iniciaron las manifestaciones.
El mandatario denunció que en diversas localidades de Cuba se registraron robos en tiendas locales, mientras que, en otras zonas, los manifestantes volcaron autos y lanzaron piedras contra las fuerzas del orden público, según reportó la agencia Sputnik.